El tesoro que no ves: ¿Cuando se vaya el fuego vas a seguir prestando atención?

“Los Gobiernos de Entre Ríos y Santa Fe, junto a los ministerios de Seguridad, de Agricultura y de Ambiente y Desarrollo Sostenible, firmaron un acta acuerdo para abordar de manera conjunta y brindar una respuesta a la problemática de incendios de pastizales que impactan en la zona del delta del río Paraná, con consecuencias para el ambiente y la salubridad pública. En tal sentido, se declaró como zona crítica de protección ambiental al ámbito interjurisdiccional del delta del río Paraná de Santa Fe y Entre Ríos.”

Así comienza la nota subida en el portal oficial del gobierno nacional, al finalizar el día viernes la reunión en la que los presentes firmaron un acta que los dueños de las tierras no tardaron ni 24 horas en quebrantar. “Es una provocación” dijo Pablo Javkin y seguramente tenga razón. Durante todo el fin de semana en Rosario y la región no se pudo respirar y las columnas de humo fueron tan grandes que nadie pudo evitar verlas. En lo que va del año, se registraron mas de 2700 focos de incendios y una innumerable cantidad de especies ven amenazada su vida.

Ahora bien, hay algo en lo que tenemos que enfocar la vista de manera tal de que cuando las llamas que hoy se extienden hasta por 18 kilometros, se apaguen, sigamos prestando atención. Y eso es la importancia que tienen los humedales del Paraná. En Poriajhú dialogamos con Florencia Ferreti del Taller Ecologista y con Sebastian Lopez Brach, fotografo corresponsal de NatGeo, encargado de investigar los humedales de nuestra región.

Sebastián comentó: “Los humedales son fundamentales, no sólo para Argentina sino también para toda Latinoamerica. Representan una enorme reserva de agua dulce y es hogar de una gran diversidad de especies”.

“De más está decir que éste ecosistema es mas que importante para nuestro planeta. No sólo por las funciones que cumple como regulación hidrica, sino también por ser hogar de miles de especies que, dicho sea de paso, no vienen padeciendo desde estos meses, sino desde hace mucho tiempo”. “Me parecen lógicas la gran cantidad de denuncias porque estamos frente a un problema ambiental muy serio”.

En el mismo sentido, desde el Taller Ecologista, una organización que hace años viene bregando por el reconocimiento y la protección de los humedales dijo: “Es un sistema que está regido mayormente de agua. Aguas que no están siempre en el mismo estado, depende del pulso del río. Cuando crece, genera lagunas por ejemplo, donde los peces mas pequeños pueden desarrollarse”.

Agregó: “Hay un montón de sedimentos, de nutrientes, y también de plantas que se encargan de retener los contaminantes de nuestro río y hacer posible que luego bebamos agua pura. Ofrecen además sitio para muchos animales migradores. Funciona todo de manera ensamblada, como un reloj excepto en momentos como éste de históricas bajantes”.

Y se preguntó: “¿Si hoy el humo no estaría afectando a gran parte de los y las rosarinas cuántos de nosotras estaríamos hablando de este problema? ¿Somos conscientes que vivimos en uno de los humedales mas importantes del mundo? Es necesario seguir informando”.

Es ecocidio

En los últimos días, gran cantidad de organizaciones ambientales y la población en general se hicieron eco del término ecocidio. Una rápida búsqueda en los diccionarios virtuales explica que el termino “hace referencia a cualquier daño masivo o destrucción ambiental de un territorio determinado. El ecocidio puede ser irreversible cuando un ecosistema sufre un daño más allá de su capacidad de regenerarse”

Lopez Brach expresa: “Pueden apagar el fuego pero esto va a seguir. Estuvimos viendo las acciones del Ministerio de ambiente y desarrollo sostenible de la Nación y el Provincial, cuando con una brigada se hicieron presentes en los focos de incendios. Es una acción destacable, pero lamentablemente tardía. Cuando se apaguen las llamas, persistirá el daño irremediable a millones de especies”. “No se si dimensionamos la magnitud de éste problema”.

Avivar la llama de la Ley de Humedales

Florencia plantea: “Es muy necesaria una reglamentación de los humedales. Pero para eso, primero debemos conocerlo. No se puede ordenar un territorio que desconocemos. Por eso desde las organizaciones venimos buscando concientizar hace mucho tiempo”.

“Es fundamental empezar a fomentar un uso del suelo que sea sustentable y no atente contra la vida. Una ley de humedales tendría que ver con eso, ver que hay y ver que construimos con ello, colectivamente con todas las partes”.

Sebastián adhiere en la importancia de una ley de humedales, coincide en la idea de conocer para cuidar y comenta: “Cuando pasó lo del Amazonas todos salimos a denunciar y nos preocupamos. No era para menos. ¿Pero con lo que pasa en nuestra región que hacemos?”.

Al momento del cierre de ésta nota, el fuego aún no cesa y las organizaciones siguen en pie de lucha para que los humedales no pasen desapercibidos nuevamente.

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