Mangione: “Hablar del final de la causa Vicentin es apresurado”
El mes de julio terminó con un nuevo capítulo en la historia de la causa Vicentin tras la derogación de la intervención anunciada por el presidente Alberto Fernandez. ¿Y ahora que pasa? se preguntó la población. La respuesta realizada por los analistas es que todavía puede pasar de todo.
En “El hormiguero” dialogamos con German Mangione, periodista, quien viene siguiendo la causa alrededor de la cerealera del norte de Santa Fe, emplazada también en el cordón santafesino. Sostuvo que es un error hablar de un final a la historia, sino que más bien es otro capítulo más que se abre en el que posiblemente cobren mayor importancia la vía judicial.
Casi 60 días pasaron de esa jornada en la que Alberto dio a conocer la intervención de Vicentín. 60 días era el plazo establecido para poner un orden de cuestión y reordenar. Ese plazo se finalizaba esta semana: “Lo que hizo Fernandez fue no renovar esa intervención”.
Pero además, señala Mangione: “Para comenzar a desgranar esta idea, hay que tener en cuenta que el anuncio se dio el mismo día en el que se cayó el plan denominado “Plan Perotti”, que tenía que ver con la creación de un fideicomiso con intervención provincial con la condición de que los directivos de la empresa dejaran ese puesto, cediendo sus acciones temporalmente. No aceptaron y por eso ahora hay que pensar en otra forma”.
El presidente había señalado ya que si la opción propuesta por el gobernador santafesino no llegaba a buen puerto, estaba dispuesto a escuchar otras opciones. Sin embargo, por el momento, lo que parece mas contundente es que se opte por continuar por la vía judicial.
German comenta: “Es la única forma de demostrar que los directivos de Vicentín obraron de manera ilegal. Hay muchas pruebas que dan cuenta de que los empresarios fundieron la empresa a propósito para no pagar la deuda contraída, donaron parte de sus activos para no ir presos, y mucho más”. Y expresó: “Da la sensación, por el tono del anuncio del presidente, que esta batería de cuestiones son las que van a tomar escena en las próximas semanas”.
“La deuda de Vicentín es mas grande que la fábrica. Y no sólo eso puede llegar a preocupar cuando pensamos en el futuro de la industria sino también que en el cordón industrial no faltan empresas como esa y surgen las dudas sobre quien va a comprarla”. “Si esto va al despido de los trabajadores, si esto va a una quiebra fraudulenta, si va a la intervención de YPF Agro, o si va a la expropiación, aún no puede saberse”.
Nadie sabe lo que puede pasar por eso Mangione cerró la comunicación con puntos suspensivos, dejando el camino allanado para un nuevo capítulo en la historia entre Vicentín y el gobierno nacional.
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