Un testigo sobre dichos de Strumia: “escuché que a Paula se la tiró a los chanchos”
En la décima jornada de juicio por la desaparición de Paula Perassi, comenzó declarando un testigo ofrecido por la Fiscalía, quien estuvo detenido en 2016 y compartió pabellón con Gabriel Strumia.
Miguel Eduardo Carranza es un pescador de 40 años de edad, que estuvo detenido varios meses en la cárcel de Piñeyro durante 2016.
Durante ese período, estuvo alojado en el mismo pabellón del penal en que también estaban Gabriel Strumia. “Yo estaba en el pabellón número dos, donde se encontraba uno de los imputados y escuché que hablaba del caso”, sostuvo esta mañana durante su declaración frente al tribunal.
Carranza detalló: “escuché que al cuerpo de Perassi se lo habían dado a los chanchos” y aclaró que “Strumia tuvo esa conversación con otros, yo estaba mirando la tele y escuché cuando hablaba del caso de Paula”, reveló.
Aportando más detalles, afirmó que al caso de la desaparición de Paula Perassi “lo conocía de afuera, (Strumia) dijo en la cárcel que estaba él y su mujer detenida. Cuando dijo que al cuerpo se lo dio a los chanchos, me levanté y me fui al patio”, recordó.
También afirmó tener presente la fisonomía de Gabriel Strumia: “era alto, de 1.90 mts. y tenía bigote”, comentó.
Tras escuchar la revelación del amante de Paula, Carranza afirmó que quiso irse del pabellón en que se encontraba alojado. “Cuando me enteré eso me quería ir. Le dije a mi señora que me quería ir por lo que escuché”, y agregó: “fui a San Lorenzo y declaré lo que escuché”.
Juan Nóbile: “No puede desaparecer si no hay una estructura que genere esta condición de desaparecido”
En la décima jornada del juicio oral y público por la privación ilegítima de la libertad y aborto no consentido seguido de muerte de Paula Perassi, prestó declaración Juan Nóbile, miembro del Equipo Argentino de Antropología Forense. “Una mujer no puede desaparecer del centro de San Lorenzo sin dejar rastros, si no hay una estructura que genere esta condición de desaparecido”, sostuvo el prestigioso profesional.
Nóbile, quien además de integrar el EAAF se desempeña como docente en la Facultad de Humanidades de la UNR y en el Instituto Superior de Profesorado Nº 22 de Fray Luis Beltrán, recordó que junto al equipo fue convocado en el año 2015, “en la búsqueda de una persona desaparecida en la ciudad de San Lorenzo, a partir de una denuncia que versaba que el cuerpo de Paula podía estar en una cava ubicada entre Puerto General San Martín y Timbúes”.
El antropólogo sostuvo que el equipo trabaja “si se presume que la persona está muerta. Nosotros buscamos restos de personas. Partimos de la base de dar por hecho que Paula está muerta, por eso empezamos a actuar como equipo de antropología forense, porque no hay ningún tipo de indicio físico de esa persona. No podríamos actuar si tuviéramos dudas de que esa persona podría estar viva”, aclaró.
Luego ahondó que “para lograr la desaparición de un cuerpo se requiere de determinado tipo de estructura. Partimos de la hipótesis de que una desaparición requiere de un plan sistemático, de una estructuración, que generalmente tiene que ver con estructuras vinculadas a las fuerzas de seguridad nacionales y provinciales”, agregó.
En la misma línea, Nóbile aseguró que “una mujer no puede desaparecer del centro de San Lorenzo sin dejar rastros, si no hay una estructura que genere esta condición de desaparecido. Para lograr una desaparición partimos de la base de que se requiere una estructura, que puede ser policial, judicial, vinculada a poderes económicos, porque se requiere un accionar que genere este tipo de desaparición, que no genere ningún tipo de registro”, y reiteró: “para lograr estas desapariciones se requiere determinado tipo de poder, en el caso que nosotros trabajamos se refiere a fuerzas de seguridad”.
El profesional también resaltó otra constante que se da en los casos en los que interviene el EAAF, como el de Paula Perassi. “En las estructuras de seguridad, en principio, hay una ‘no investigación’ del caso, un ‘no seguimiento’. Ponen en duda a la familia y a la víctima. Generalmente todo comienza con dudar de la persona desaparecida y de su familia. Se pone en duda el atributo moral, político, de la persona desaparecida y de la familia”, sentenció.
En el caso en particular de la sanlorencina, el antropólogo aseguró que “se puso en duda la moralidad de Paula, porque se menciona su condición de amante, sus relaciones extramatrimoniales y eso, en los lugares como San Lorenzo, tiene determinado tipo de peso moral”.
Juan Nóbile explicó también durante la audiencia que –como en el caso Perassi- “mientras más tiempo pasa más dificultosa se hace la búsqueda, como en todo manual de criminalística, complejiza los trabajos de búsqueda. El discurso de la estructura desaparecedora es ese, decir que se puede haber ido, puede estar acá, allá, eso genera la ventana de tiempo que complejiza las búsquedas. Es el discurso que siguen las estructuras desaparecedoras: que los desaparecidos no tengan entidad, es el principal logro de la estructura de desaparición”, aseguró.
El testigo también se explayó en el concepto de que “una estructura desaparecedora lo primero que hace es dudar de la moral o de la familia o decir que se haya ido, se haya fugado. Las estructuras desaparecedoras están vinculadas a poder económico, político, judiciales, policiales. Una persona sola o sin una estructura económica un poco fuerte, no puede hacer desaparecer a nadie. Una estructura requiere de recursos y tiene que ver con los económicos”, definió.
Búsqueda en la cava
Además de detallar aspectos técnicos del lugar en el que el Equipo Argentino de antropología Forense buscó el cuerpo de Paula Perassi, Nóbile recordó que “llegamos ahí por una denuncia de una persona ante el juez Tutau que aseguró que a Paula la tiraron en esa cava”. Luego, “se investigó y se reunían los requisitos para que podíamos investigar en el lugar”, agregó.
Luego aclaró que “fuerzas de seguridad ya habían realizado pericias en lugares cercanos a la cava en la que estábamos excavando, en un horno de ladrillos. Las pericias daban por entendido que Paula estaba muerta y que su cuerpo había sido quemado, en una empresa, en IDM, en un horno de ladrillos, en la isla. Surgía que fue desaparecida y salió la idea de la quema del cuerpo, en las entrevistas que realizamos”, una parte del trabajo del EAAF a la que definió como “construcciones sociales, lo que entiende un conjunto de la sociedad sobre el caso”.
El antropólogo recordó también frente al Tribunal que “la cava daba permisos a varias empresas de la zona para tirar basura y no había ningún tipo de control de lo que se tiraba allí. Es un trabajo muy complejo excavar una cava de 60 metros por 14 de profundidad, y analizar las bolsas de basura que se tiran en ese lugar”, graficó.
Desaparecidos
El renombrado profesional aseguró en otro tramo de su testimonio que “la desaparición de una persona es de los hechos más trágicos que le pueden suceder a una familia en las sociedades humanas, porque impide saber la verdad y la posibilidad de elaborar un duelo. Los familiares que tienen familiares directos desaparecidos cortan sus objetivos y desarrollo de vida a partir de eso”.
En el mismo sentido, Nóbile expresó que “saber la verdad del cuerpo y lo que pasó y tener los restos para elaborar el duelo, es lo esencial de nuestro trabajo. Es fundamental para nosotros como tarea humanitaria, darles nombre y apellido a los cuerpos, porque no se puede seguir viviendo si no se sabe esa verdad. Nuestro trabajo de búsqueda va a terminar cuando aparezca el cuerpo y se lo podamos restituir a los familiares”, concluyó.
Por último, el antropólogo descartó otras hipótesis sobre el destino de Paula Perassi.
“Si me preguntan si podría haberse suicidado, nunca seguiría esa hipótesis. El suicida generalmente quiere mostrar un cuerpo y dar un mensaje de que se suicidó. No se puede lograr el suicidio con una desaparición del cuerpo”, explicó.
También dijo que “no tomaría como hipótesis que haya sido víctima de trata de personas una chica de 33 años, con dos hijos, institucionalizada, del centro de una ciudad. No es el perfil que se busca para trata de personas, no lo seguiría como hipótesis”, expresó.
Equipo Argentino de Antropología Forense
El grupo de trabajo que integra Nóbile, ya lleva 35 años de labor y se fundó con el objetivo central de identificar cuerpos de personas desaparecidas del terrorismo de Estado, generado en la dictadura militar.
El 90 por ciento de los casos en los que trabaja están vinculados a la dictadura militar, pero desde hace 10 años, también está vinculado a desapariciones recientes, producidas en periodos democráticos.
El EAAF trabaja en diferentes continentes y países. Guatemala, El Salvador, México, Chipre, la ex Yugoslavia y Chad, entre otras naciones de África, Asia y Europa, en las que sus conflictos dejan miles de personas desaparecidas, fueron escenario de su labor de investigación.
Juan Nóbile, que forma parte del equipo desde hace 16 años, recordó en la audiencia de este lunes que “trabajamos en un principio humanitario, con búsqueda de personas desaparecidas. La desaparición la consideramos una tragedia. En todas las culturas, para elaborar un duelo, se necesita tener certezas. El cuerpo es fundamental para elaborar el duelo”, aseguró.
Flavia Campeis